Cuatro campeones en busca del tiempo perdido

Remco Evenepoel, el vigente campeón de La Vuelta, ha cambiado su programa de carreras para defender su título. Tampoco estaba previsto al principio de la temporada 2023 que Geraint Thomas y Egan Bernal estuvieran en la salida oficial de Barcelona, a diferencia de Richard Carapaz, que sí tenía planeado ir después del Tour de Francia. Frente a la dupla del Jumbo-Visma, Primoz Roglic y Jonas Vingegaard, para quienes todo fue como deseaban en el Giro de Italia y en el Tour de Francia, otros cuatro ganadores de grandes vueltas se están preparando para La Vuelta.

Fueron ocho el año pasado en Utrecht: Roglic, Carapaz, Jai Hindley, Tao Geoghegan Hart, Simon Yates, Vincenzo Nibali, Alejandro Valverde y Chris Froome. Los tres últimos se habían descartado ellos mismos de la lista de favoritos al encontrarse en el ocaso de sus carreras, aunque el británico no estuviera a dos meses de su retirada deportiva como sí lo estaban el italiano y el español.

El plan para la carrera deportiva de Evenepoel estaba trazado: La Vuelta 22, Giro de Italia 2023, Tour de Francia 2024 (con una contrarreloj entre Mónaco y Niza como colofón, en el día de la fiesta nacional belga). Este calendario se vio interrumpido por una infección por Covid-19 a mitad del Giro, justo después de recuperar la maglia rosa gracias a una victoria en la contrarreloj por un margen más estrecho de lo esperado.

Menos de una semana después de su retirada, Patrick Lefévère descartó la posibilidad de participar en otra gran vuelta este año por falta de tiempo para preparar el Tour de Francia y porque "nadie aceptaría de él otro resultado que no fuera la victoria final en La Vuelta, porque ya la ha ganado", argumentó el mánager del Soudal-Quick Step. Desde entonces ha cambiado de opinión, presionado por su protegido. El 10 de julio dijo a sus seguidores: "Nos vemos en Barcelona". "Cuando veo el nivel al que ha vuelto y las ganas que muestra, no puedo sino acceder a su petición", explicó el manager. "Remco quiere asumir grandes retos". Y ahora vive en España, en la Comunidad Valenciana. 

El cambio en el calendario ciclista de 2023 hizo que vistiera el maillot de campeón del mundo poco más de diez meses en lugar de doce. Es el tiempo que pasó entre su triunfo en Australia, tras La Vuelta 22, y su vigésimo quinto puesto en Escocia, en un circuito poco favorable para él, pocos días después de su tercer título en la Clásica de San Sebastián. A menos que consiga vestir algún maillot distintivo al final de la contrarreloj por equipos inaugural, vestirá por primera vez el maillot de campeón belga de ruta en la salida de la 2ª etapa, en Mataró, el 27 de agosto.

Al igual que Evenepoel, Thomas tenía el Giro como principal objetivo para 2023 después de haber ocupado todos los puestos del podio en el Tour de Francia: primero en 2018, segundo en 2019, tercero en 2022. En la contrarreloj de la víspera de la etapa final de Roma perdió cruelmente la maglia rosa que llevaba desde la retirada de Remco (con la excepción de un paréntesis de dos días de Bruno Armirail) ante Primoz Roglic por apenas catorce segundos. Tras especular con una revancha en La Vuelta dos días después del Giro, el galés hizo oficial su participación el 22 de junio en el podcast Watts Occurring, que dirige con su compañero de equipo Luke Rowe.

Su única participación en la ronda española no fue memorable, teniendo en cuenta que lleva dieciocho grandes vueltas a sus espaldas. Fue en 2015. Al igual que en el Tour de Francia de aquel año, tuvo que correr al servicio de Chris Froome, que sufrió una fractura en el pie a mitad de carrera en Andorra. Sin embargo, no encontró espacio para lucirse en carrera después del abandono de su líder, siendo su mejor puesto el duodécimo en la contrarreloj de Burgos, a 2'28'' de Tom Dumoulin (y un 69º puesto en la clasificación general final).

A sus 37 años, Thomas sabe que se le acaba el tiempo y, si vuelve a La Vuelta, será con la sensación de que aún no ha explorado todas las posibilidades que le ofrece el ciclismo profesional. Se ha tomado en serio su preparación, tanto en altitud como en la Vuelta a Polonia (siendo tercero en la contrarreloj celebrada como test antes del campeonato del mundo).

Geraint Thomas no ha corrido ninguna gran vuelta con Egan Bernal desde el Tour de Francia 2019, donde terminaron segundo y primero respectivamente. El año anterior, cuando se unió al Team Sky, el colombiano iba a debutar en una carrera de tres semanas en La Vuelta 18, como era lógico con la prometedora carrera de un escalador de la cordillera de los Andes. No obstante, después de su victoria en el Tour de California en mayo, el equipo británico, temiendo una falta de potencial en la montaña mientras Chris Froome luchaba en el Giro, que terminó ganando, lo seleccionó para el Tour de Francia. ¡Y demostró ser imprescindible para Thomas!

Desde entonces, el prodigio de Zipaquirá ha ganado el Giro de 2021, del que no se había recuperado del todo cuando participó en La Vuelta 21 dos meses y medio después: sexto en la general, 13'27'' por detrás de Roglic, y con un cuarto puesto en el Alto del Gamoniteiru como mejor resultado. Incluso perdió el maillot blanco de mejor joven al final, superado por el fallecido Gino Mäder. Todavía se encuentra en proceso de recuperación de su forma tras el terrible accidente que sufrió en enero de 2022. Tras terminar 36º en el reciente Tour de Francia, sacó conclusiones positivas: "El ritmo de carrera que cogí habría sido imposible de alcanzar solo con los entrenamientos". Gracias a ello, se mostró muy motivado para volver a La Vuelta, aunque es prudente en cuanto a sus objetivos de rendimiento.

De los seis ganadores de grandes vueltas que han expresado su intención de participar en La Vuelta 23, Richard Carapaz es el único, junto con Roglic, que ya ha subido al podio en las tres grandes: ganador del Giro en 2019 y segundo en 2022, segundo en La Vuelta 20 y tercero en el Tour de Francia de 2021. El año pasado, tras un inicio complicado en la ronda española, cambió su objetivo hacia las victorias de etapa (consiguiendo tres) y heredó el maillot de lunares tras la caída de Jay Vine.

En cuanto se unió al equipo EF Education-EasyPost el pasado invierno, programó dos grandes vueltas. La Vuelta será su única oportunidad de hacer una y terminar en el podio de una gran vuelta por quinto año consecutivo, ya que sufrió una caída en la primera etapa del Tour de Francia junto Enric Mas en el descenso de El Vivero, en Bilbao. Después, regresó a Ecuador para tratarse una pequeña fractura en la rótula. Toda su temporada 2023 se decidirá de Barcelona a Madrid.